Estoy
en un parque cerca de mi casa sentada en una banca; siento pasar el aire fresco
en mis mejillas, las hojas de aquellos arboles, se menean;
las ramas de aquellas flores se encuentran todavía en él, esos arbustos muy
verdes tarde que temprano se van a deshojar
con el cambio de las estaciones se caerán. La sombra de la luna
resplandece en todo el parque en la oscuridad, a falta de electricidad, aun así
se ve. Se siente la frescura de la naturaleza al mismo tiempo que yo me
cambiara de orilla a orilla de este parque hermoso me siento tan sana, tan
frágil, tan bien, tan llena de vida que
quisiera que muchos disfrutaran en este momento lo que me inspira a escribir…
¡Ahí veo una tienda! Podría comprarme un café, ¡Ammmh, qué rico! Acompañado de
un delicioso pan.
A lado del parque está un ciber, al otro lado una tienda muy
grande, alrededor de él se encuentran muchas casas; todas con la luz apagada. Veo
pasar los automóviles. ¡Oh, se detuvo uno! Así que es mejor retirarme.
Jennifer Pérez Rodríguez
Conalep 150 Tehuacán Puebla
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