viernes, 14 de diciembre de 2012

CAROL Y EL ESPEJO


La familia Winston estaba de visita en casa de la abuela materna. Charlotte y Bryan eran dos niños muy inteligentes pero también muy curiosos, les encantaba visitar a su abuela materna porque les contaba fabulosos cuentos antes de dormir y eso los entretenía muchísimo y les ayudaba a salir de la rutina de sus vidas en la ciudad. Aunque sus padres los querían mucho, vivían atareados por sus empleos: la madre  una prestigiosa abogada y su padre dirigía una compañía de bienes raíces, por lo que casi siempre estaban en la guardería o en casa de algún pariente de sus progenitores. Desde  luego que en cuanto se enteraron que visitarían a la abuela Sara, empezaron a dar saltos de alegría.

                Por fin llegaron a la casa, estilo colonial  con grandes ventanales, con una escalinata en la entrada y la puerta de madera con una manija antigua de raro metal a la que los niños habían llamado: el pequeño castillo de la abuela. Todos estaban  muy contentos  de volver a reunirse, se abrazaron y los padres de los niños se despidieron. Los niños fueron a la cocina para que su abuelita les sirviera comida. El tiempo transcurrió entre risas y recuerdos de viajes pasados a la casa de la abuela, y llegó la noche. La abuelita Sara llevó a los niños a su alcoba para arroparlos y contarles la tan esperada historia de ese día:

−Mis queridos niños, sé que están esperando la historia y les diré que ésta nos durará cinco días pues se trata de las “aventuras de Carol”, una niña ordinaria como ustedes que también se aburría con su vida. Era una chiquilla muy lista, simpática y curiosa, de unos once años. Su madre había muerto cuando ella apenas tenía cuatro, por lo que no recordaba cómo era físicamente. Su padre tenía una pequeña granja con caballos, cerdos, gallinas y algunos patos. Carol era la menor de cuatro hermanos y todos eran varones; así que era la única mujercita en la familia. Su padre la mandaba a traer agua al pozo, y alimentar a los cerdos y las gallinas. Apenas comenzaba a ir al colegio y era su único entretenimiento, se divertía poniendo nombre a los animales de la granja y contando las flores en camino cuando venía a casa. La niña se sentía terriblemente aburrida pero un pensamiento ocupaba su mente: conocer a su madre, pues había muerto cuando la niña era muy pequeña y no la recordaba. Un día que su padre la mandó por agua al pozo, algo extraordinario le sucedió: se quedó mirando al cielo un instante y después buscó su reflejo en el pozo y al momento que deseaba ver a su madre, del pozo brotó una luz brillante y apareció una escalera que conducía hasta una pequeña puerta. La niña bajó y abrió la puerta sin el menor temor. Al entrar se encontró frente a una hermosa fuente de color azul y dentro de un castillo. Entonces comenzó a escuchar una voz que en susurro le decía: “para encontrar la verdad/ cinco pruebas debes pasar/ el libro de la sabiduría debes buscar/ y el secreto descubrirás”. A Carol le parecieron extrañas esas palabras y en ese momento se dio cuenta que estaba en los jardines de un gran castillo. Así que sin demora se propuso buscar el libro del que hablaba la voz. Caminando llegó a una habitación lujosamente decorada con candelabros en la pared, una gran mesa en el centro adornada con un bello mantel color caqui, y los cubiertos dispuestos como para un gran banquete. Atravesó un enorme pasillo de mosaico verde pistache perfectamente pulido y llegó a la biblioteca. Se quedó pensando un momento cómo hallaría el libro de la sabiduría entre tantos y entonces se dio cuenta que casi al centro de la habitación había una caja de cristal arriba de una mesa, y dentro se encontraba un libro grueso,  con los bordes en color dorado. “Ese debe ser” pensó. Caminó hacia  la caja de cristal, la abrió con mucho cuidado y tomó el libro, pero al momento, el libro se elevó por el aire y se abrió destellando ante los ojos de la niña; entonces escuchó una voz que parecía provenir del libro y decía: “Sé lo que buscas querida niña y aquí lo encontraras. No será fácil primero debes pasar la prueba”, “Un secreto deseas conocer/ que a tu pasado te hará volver”, “Si los acertijos logras resolver/ las cuatro llaves vas a tener/ y con ellas abrirás, las puertas de la verdad”. Y continuó expresando: “Bien jovencita, ya sabes lo que tienes que hacer, no estarás sola, Brillante te acompañará. La niña se quedó pensando un momento, de pronto apareció una lucecita del tamaño de una esfera que emanaba luz y le dijo: “Sígueme, te ayudaré a buscar las llaves”, la niña la siguió y se dirigieron a un salón suntuosamente decorado como el resto de las habitaciones pero en su interior tenía algunos cuadros de personas vestidas de gala y al centro, colgado en la pared, un espejo. La voz le dijo a la niña: “Acércate al espejo y dile: Lindo espejito, dame el primer acertijo”, la niña lo hizo y al momento aparecieron en él, una letras que decían “No soy luna, ni sol y en medio del cielo estoy”. La niña se quedó pensando un momento y se llevó las manos a la cabeza consternada pero, Brillante le dijo: piensa, piensa Carol observa el espejo. Tras varios minutos de examinar el espejo, la niña encontró la primer respuesta: ¡¡Es la letra E!!, dijo la niña con un grito de jubilo. Entonces el espejo cambió lo que tenía escrito y el siguiente acertijo apareció: “Forman las hojas mi ser, produzco fruto invisible, hay muchos que me devoran pero no soy comestible”. Nuevamente la niña comenzó a ponerse nerviosa y la luz le dijo: “¡siéntate! respira, te sentirás mejor si salimos al jardín para pensar”. Ambas salieron. De pronto la niña vio deshojarse una rosa por el fuerte viento que soplaba. Al momento llegó la respuesta: “¡Es el libro!”, dijo con cara de satisfacción, vamos a ver al espejo. Las letras en el espejo volvieron a cambiar, el nuevo acertijo decía: “Me rodea, me rodea, me sigue por donde voy y aunque yo jamás lo vea, él está donde estoy yo”. La niña y Brillante salieron nuevamente al jardín a pensar. Pasaron veinte  minutos que a Carol  le parecieron eternos y por fin dijo nuevamente emocionada: “¡Es el aire!, Brillante contestó “¡Bien Candy, muy bien”. Fueron nuevamente ante el espejo y la niña dijo la respuesta entonces y el nuevo acertijo apareció: “Están a tu lado y no las ves /piensa un rato y dime qué es”. Igual que las veces anteriores, la niña y Brillante salieron al patio a sentarse a pensar y Brillante le daba pistas a la niña; así pasaron dos horas y por fin Carol gritó: “Ya lo tengo, son las orejas”, y Brillante hizo un sonido como el de una campanilla cuando se gana un premio. Ambas se dirigieron al salón donde se encontraba el espejo y la niña gritó emocionada: “Espejito, espejito, tengo la última respuesta: son las orejas”. En ese momento el espejo se desvaneció y en lugar de Brillante, apareció una bella dama con un vestido azul que tomó de la mano a la niña y le dijo: “Carol, ven conmigo, te ayudaré a encontrar las llaves”. La primera estaba justo frente a ellas en una mesa que se encontraba bajo el espejo, la niña la tomó y caminó junto a esa mujer que de pronto le había inspirado cariño y confianza, como si la conociera de antes. Llegaron a una gran puerta de madera muy luminosa, y brillante le pidió la llave con la que abrió la puerta y al momento vieron que la habitación estaba llena de instrumentos musicales que emitían al unísono una hermosa melodía, Brillante le dijo:  Candy ¿Recuerdas qué decía el último acertijo?” La niña repitió el acertijo y también la respuesta y preguntó: “¿Ahora debo buscar otra llave, verdad?”. “Así es, Candy piensa bien antes de tocar los instrumentos porque si no aciertas, la puerta se cerrará para siempre y no podremos salir de aquí”. La niña observó por momento el arpa, un piano la trompeta, el contrabajo y notó que la guitarra no emitía sonido alguno, fue hacia ella y la sacudió al momento escuchó un ruidito, siguió sacudiéndola hasta que por fin la llave salió por el orificio que todas las guitarras tienen en medio. En ese momento los instrumentos cambiaron la melodía al sonido de una fanfarria y la puerta se abrió. Brillante y la niña salieron y se dirigieron nuevamente a la biblioteca. “Ahora”, dijo Brillante: “piensa bien y dime ¿qué debes hacer con la llave dorada que tienes?” La niña notó una pequeña vitrina donde se encontraba un libro parecido al que anteriormente le habían hablado. Caminó hacia la vitrina e introdujo la llave. Tomó el libro y lo colocó en una mesa y ¡¡ooh, sorpresa!!, el libro era un caja. La niña levantó la tapa superior y encontró un sobre con una nota que decía: “Felicidades. Si has llegado hasta aquí, significa que has pasado las  pruebas del espejo y tienes derecho a pedir un deseo, piensa bien lo que quieres porque no cualquier deseo te será concedido. La niña se quedó inmóvil y en su mente repetía: quiero conocer a mi madre, la quiero conocer. De pronto sintió que alguien la tomaba de la mano y descubrió que Brillante la que antes era un ángel; se había transformado en otra persona que se la hacía muy familiar. Llevaba un atuendo parecido al suyo pero con diferente color y una bandita café ceñida a su cintura. El cabello ensortijado le caía a los lados y unos collares adornaban su cuello. Calzaba sandalias de piel como las que usaban las campesinas del lugar y la bella mujer le habló con voz dulce: “No me recuerdas pequeña mía, soy tu madre. La niña la abrazó fuertemente y sollozando le dijo: “¡Mamá, mamita chula. Hace mucho que sueño con este momento! La madre y la hija caminaron hacia los jardines y se sentaron en un recodo del jardín. La madre dijo a Carol: “Escúchame con atención pequeña, estaré aquí por un breve tiempo, pues tengo que darte unos consejos que jamás, debes olvidar: El destino te ha reservado un gran porvenir y quiero que me prometas que siempre cuidaras de tus hermanos y de tu padre, sobre todo cuando esté enfermo y te necesite. Haz tus deberes con ahínco y determinación; recuerda que la pereza no es buena. No creas todo lo que te dicen, hasta verlo con tus ojos, recuerda que no toda la gente es honesta y habrá quienes deseen causarte problemas, y por último: estudia mucho porque algún día todo el mundo sabrá tu nombre. Ahora debo irme hija mía, siempre estaré a tu lado para protegerte y cada vez que me extrañes abre esta sombrilla y siéntete protegida”. La mujer le dio   una hermosa sombrilla color azul cielo con rosas lila en el forro. Ambas caminaron hacia una colina mientras la madre iba avanzando en el aire y también despareciendo. Candy abrió su sombrilla y la sostuvo en su mano izquierda mientras con la derecha se despedía de aquella bella ilusión. Aquella escena tenía el hermoso fondo de la región del Piamonte, con mucho la región más verde y más linda de todas. De pronto la niña voltea cierra su sombrilla y encoge los hombros y decide marcharse hacia su hogar.

Por: Briseida Neri Bravo
Orientadora  Educativa
Conalep Tehuacán

BUENOS CONSEJOS


Quizás hayas escuchado frases como: “Que joven mal educado”, “¿donde están tus modales?”, “¡eso no se hace jovencito!”. Estas frases se emiten cuando alguien manifiesta un comportamiento inadecuado o fuera de lugar que afecta la convivencia social y es justo por esto que decidí compartir con ustedes unos pequeños pero significativos consejos que les ayudarán a evitar verse envueltos en alguna situación desagradable que les provoque malestar, angustia, o vergüenza. Porque en algún momento de su vida los llegaran a necesitar  y más vale estar preparados.
            Sé que como joven tienes ímpetus  difíciles de controlar pero sólo es cuestión de voluntad y para muestra un ejemplo: empecemos con el colegio, ¿te ha sucedido que algún docente te regaña porque estas hablando en tono alto, que casi parece que gritas, o tal vez porque estas mal sentado, o no llevas el uniforme correctamente?, pudiera ser que estés molestando a otros compañeros arrojándoles basura o hablándoles con groserías, o quizás diciéndoles algún apodo ofensivo. A esto, estimado joven, se le llama falta de educación y lo hemos pasado por alto muchas veces por desconocimiento y otras porque a pesar de que los adultos le digan aun joven o señorita que está actuando mal, no modifican su mal comportamiento.
            Otros puntos que debes tomar en cuenta dentro del colegio son: cuidar el mobiliario de tu escuela, y esto incluye todo material con el que trabajes; respeta  las mochilas de tus compañeros; no pintar las paredes en baños, salones, laboratorios y áreas de esparcimiento; protege las áreas verdes, evita chiflar o llamar a gritos a otro compañero aún si está lejos de ti. Lo correcto es ir hacia él para comunicar el mensaje. Y algo muy importante: si observas a alguien más dañando o destruyendo, debes comunicarlo a tus maestros o personal administrativo. Sé que esto te generara una falsa idea de que acusas a alguien pero no olvides que siempre debemos hacer lo correcto y ayudar para que también otros lo hagan, así que no te sientas mal por los malos hábitos de otros chicos.   
            Hablando de chicas es muy común que entre mujeres se cataloguen con apodos ofensivos y  se pongan trampas por llamarlo de algún modo, pero no deben olvidar que el respeto que ustedes den a otros es el mismo que les será devuelto. Les daré algunos ejemplos de lo que no debemos hacer las mujeres de cualquier edad: propagar mentiras de otros(as), escribir mensajes ofensivos para otras compañeras, contar las intimidades de una examiga que ahora te cae mal. En algunos colegios se expulsaba a las jovencitas que incurrían en estos actos deplorables para su persona  por considerarlos de mal gusto y por ser mala influencia para otras estudiantes. En fin son situaciones desagradables en las que nunca debes verte inmiscuido porque afectan tu imagen como buen estudiante.
            No olvides lo básico: pedir las cosas por favor, dar las gracias, devolver los objetos que te presten en las mismas condiciones que te fueron entregados, usar el lenguaje apropiado en todo lugar, es imprescindible y apreciado. Sé de jóvenes que por dejar salir una mala palabra, han perdido la oportunidad de un buen trabajo o les han prohibido la amistad de otros chicos e incluso han tenido que dejar al novio(a) porque sus padres no aprueban dicha relación, debido a  su falta de modales. Cuando visites la biblioteca ya sea la escolar o cualquier otra procura guardar silencio, o hablar lo más quedo posible, recuerda que los demás también están estudiando, debes usar los libros que consultes adecuadamente, sin doblarlos rayarlos. Procura llevar tu cuaderno para tomar notas. Si tienes que realizar un trabajo en equipo, concéntrate en el trabajo y dejen los temas externos para otra ocasión.
            También es importante que creas en ti, te fijes metas y las cumplas. Imagino que como adolescente, tendrás dudas y obstáculos que te impidan llegar pero con voluntad amor y paciencia lograras lo impensable. Recuerda que para mucha gente la educación que manifiestes es el reflejo de lo que tus padres te han enseñando en casa, así que no querrás avergonzarlos, máxime si te han criado de la mejor manera posible.
Te habrás dado cuenta que la frase “como te ven te tratan” bien podría traducirse te tratan como te comportas; recuerda “no hay peor lucha que la que nos e hace”. Has visto a los niños que trabajan en la calle que no tienen un padre, una madre o alguien que los cuide se ocupe de ellos y ni siquiera tienen dónde dormir, que sólo pueden comer si les alcanza el dinero, fruto de su trabajo por limpiar parabrisas, echar fuego por la boca o hacer malabares en un crucero y todavía están expuestos a que los atropellen los insulten o los lleven a la cárcel. Considérate afortunado de tener un techo, comida y unos padres que a pesar de sus carencias te están mandando a una escuela a estudiar y aprender algún oficio para que en un futuro no muy lejano te puedas mantener por ti mismo y hazlos sentir orgullosos de tu formación, es preferible que los llamen de tu colegio para ser testigos de tu buen desempeño estudiantil en vez de que los citen para darles una queja  de tu mal comportamiento en clases. Toma en cuenta que también a uno se le conoce por sus amistades por ellos la frase “dime  con quién andas y te diré quién eres” o ésta: “el que con lobos anda a aullar se enseña”.
Para finalizar sólo me restan algunos consejitos más para cuando estés frente al público, cuando asistas a una conferencia, estés en el cine, o viajes en autobús procura hacer el menos ruido posible; es muy desagradable escuchar el sonido de un teléfono celular a mitad de una película o bien la conversación de otros durante un viaje. Si te acompañan niños pequeños, procura que no molesten al pasajero delante de ti o detrás, lleva contigo un juguete para entretenerlos,  suficientes mamilas o un chupón de miel para mantener al niño entretenido recuerda que tus derechos terminan donde empiezan los de los demás, si tienes que bajar el respaldo de tu butaca, procura no incomodar al pasajero de atrás.
Podría  nombrarte mil ejemplos que hacen referencia a las buenas costumbres, buenos modales y educación, pero sólo te diré unas sencillas palabras que muchos historiadores han aplicado al aspecto legal y político de nuestro país que escribió nuestro finado LIC. BENITO PABLO JUÁREZ  GARCIA, “El respeto al derecho ajeno es la paz” dicho de otro modo, “No hagas a otros lo que no quieras que te hagan a ti” también podríamos decir, “Trata a otros como quieras que te traten”.
           


Por: Briseida Neri Bravo
Orientadora  Educativa
Conalep Tehuacán

ERRORES PERFECTOS

Desperté entre tus desvelos dormidos, con un pie en tierra y uno otro fuera de ella,
En la danza estática de tus cabellos sin censura, bailé como el amor en tu sangre.
Mi pensamiento con tus tristezas irrisorias, al fondo de la última pieza de vals.
En la fúnebre felicidad de tu sonrisa blanca, entre pestañas, entre el enigma difundido de nuestro amor certero.
Somos lindos para ser un par de feos, camaradas de charlas y soledades compañeros en soledad innata.
Amante parcial y mi amigo total, con nuestros ataques de ira felices tejidos de nuestros errores perfectos.
Ganamos lo que perdimos, en nuestra vista ciega en el sentimiento lejano de tu melancolía gozosa.
En la luz opaca de mi cantar, en tu labio inferior frente a mi paciente desesperación.
Y aquí estamos. Combinando la lluvia con el invierno cálido, exhalando tranquilidad del ruido mudo, tras el canto de un ave.
En la calma de tu realidad ficticia, lejos de mi abrumadora paz, caminamos y viajamos sin descansar.
Llegamos a la oscuridad deslumbrante, y con nuestras manos aplaudimos al amor dando bienvenida al final.
El final del abandono, navegando en el cielo, caminando en el mar, recalcando la copia original de tu beso radical.
En las lágrimas secas sobre tu mejilla dorada, como un suspiro interrumpido, completo, totalmente roto.
Sobre la idea un silbido, olvidándote te he recordado. Te he nombrado embajador de mi ser total, como las olas cubren al mar.
Dimensioné tu cuello, y  era perfecto para mis brazos. Aparté tu cuerpo, abrazándolo. Y en un choque de emociones contenidas, besé tus deseos.
Soy una chispa de alegrías prematuras, y tú un sensato loco. Y somos un desenfreno organizado, embarullado y ordenado.
Pero el futuro no nos inmuta y no pensamos en él. La lógica del mundo y sus mentiras verdaderas, en sus almas llenas de vacío, son nada.
Porque, menos es más. Porque somos uno, dentro del par.  Y tu ceguera miró en mí miró un ser especial.
Y desperté entre tus desvelos dormidos, como un respiro, como un leve silbido. Porque estuve en el sol, pero sentí frío. Y me mostraste, todos los orígenes del amor, y con ellos; mi propio ser.

Itzel Rosas Caballero
Teziutlán

“La novia mustacho y el novio princeso”



Eran las doce del día. Tenía un vestido beige con bordados purpura. Fué en la casa de los locos, más conocido como “la nave” por el diseño del lugar. Había de todo esa vez: caras largas y miradas, El señor sapo en sus rimas, las tías en el pastel y los invitados sobre la mesa como si fueran niños. La novia Mustacho, con sus hombros de trapo y sus gafas de sol, saludando al público, invitó a todos a hacer un brindis: rosas pintadas de blanco y, entre sus vestidos, se podía mirar la playera del América (vaya gustos). El novio, con su moño rosa en el cuello, aventó el ramo a los señores caballeros que tenían trajes de corazones y helados de chocolate; los globos de helio y las piñatas listas para romperse. Comenzaron a ponerse calientes, como en las películas que se emocionan y rompen piñatas y hacen todo un relajo; la piñata tenía piñas, calabazas, naranjas y todo tipo de frutas. La novia para romper la piñata, se puso un casco (el casco de la carroza).

 La música flotaba y perforaba los oídos como en los conciertos. Con ella estaban los caramelos, una perfecta combinación, señores.  Los invitados, batían las manos, el señor Sapo cantaba haciendo burbujas en el aire, la novia Mustacho con su playera americanista medio escondida y su casco bailaba , los caballeros de honor a una misma voz cantaban y su moño color rosa hacía contraste con sus zapatos de quinceañera. Las damas de honor, con una rosa en la cabeza, rosas blancas y el Mustacho dando un toque francés, sin perder el estilo, claro.

Los meseros eran conejos blancos muy bien arreglados, llevando copas de un lado a otro con jugo de uvas, las uñas pintadas y uno que otro con rastas en la cabeza, eran formales pero tenían buenos gustos. Las palomas mensajeras eran parte de la orquesta y con sus patitas tocaban el piano. Fue la hora del banquete y la novia mustacho fue llamada para partir el pastel, un pastel con forma de galleta oreo, que desde su infancia habían sido sus favoritas, hasta el día de hoy. El ratón ayudo a cortar los trozos de los invitados, el pastel estaba riquísimo.

Todo el mundo estaba contento, los novios bailando tangos, los cantores, los músicos incluso los suegros, el señor y la señora Pata padres de la chica Mustacho, y el señor y la señora Pie, los papás del joven princeso. Y en ese día había de todo; sonrisas relucientes, abrazos de miel, deseos de vainilla y así, una cesta de buenos deseos para los novios.  Los músicos tenían sueño y las palomas ganas de ir al baño, entonces la música tuvo que parar por un rato, los meseros estaban de un lado a otro, corriendo y saltando. La tarde llegó, y las luces se prendieron, las amigas luciérnagas habían llegado, los porros voladores y los granitos de arroz en el suelo, el reloj Tic toc, y los pedazos de sueño por los aires, bailando con los globos flotantes llenos de vida. La tarde sólo duró minutos, la felicidad rompió el tiempo de todos los individuos esa vez, hasta que la noche los cubrió de sí misma.

Así que lo imaginario se siente tan real, que me quedaré otro rato. La posibilidad de regresar es nula, la probabilidad exacta de volver a recordar.

Itzel Rosas Caballero
Conalep Teziutlán.                                                                                     









Después de ti


Después de ti, tu cuerpo: ausente de ti.

Frío apartado. Volando sobre otros cielos, como un murmullo distante.

No mirarás la niebla elevarse sobre los campos bañados de espigas. No sentirás amor... extrañarás esas emociones que se fusionan formando extrañas sonrisas y cejas fruncidas.
Después de ti, tu acento.

Grabado en las memorias, y almacenado en el eco del adiós.

No correrás más, no cubrirás su cuerpo al deslumbrar la luna. Echarás de menos sus manos sobre tu piel, los labios sobre los tuyos formando sonrisas mudas. No mirarás las flores nacer, mientras se visten de gloria; y cómo,  al terminar la primavera, ceden al verano copioso.

Después de ti, tus labios.

Aguardando el beso, la despedida inconclusa.

No sentirás el sol caminando atento, imaginando tu vida. Esos pensamientos ya no vendrán. No cubrirás sus ojos para que adivine quién eres aunque bien sabe, porque tu aroma es su escudo, su amuleto apolíneo.

Después de ti, tu silencio.

Tu despedida, que anuncia la bienvenida a la madre de todas las tristezas.

Pimientos y secretos en el desván, mientras la última pieza de vals es tocada por el sutil abrazo de la noche anterior, un abrazo que lo dice todo, una mirada que todo lo expresa.

Después de ti, tú, aroma.

Haciendo compañía en la piel de tu fiel compañero, dentro de sus poros,  en el espacio más recóndito de su capacidad mental.

 Grabado como un lunar en un pedazo de piel, como el recuerdo del primer beso, tan imposible de quitar. Tu aroma, impregnado en sí, más que una identidad en. Vivirá porque su amor es más grande que la constelación de los planetas. No le verás sonreír, formando con sus pies danzas mudas que erradicaban cualquier rastro de desánimo.

Después de ti, tú, mirar.

Tras el poder de convencimiento, cuya virtud movía corazones y cedía a las razones necias, incluso tus propias razones.

No sentirás la tarde caer con su paz anaranjada. No sentirás la euforia al escuchar tu canción, uniendo tu voz con las notas y alzando las manos en señal de emoción.

Tus señales ciegas desaparecerán, como la nieve al sol. Tus pulmones no volverán a sentir el oxígeno dentro.

Después de ti, ¿qué más? Las charlas que impartían cátedras de humanización  la vida, tan llenos de fuerzas que jamás se cansan y ánimos que no menguan, ¿dónde quedarán hoy? Estarás en soledad, volviendo al origen de tu existir, porque polvo somos.

¿Después de ti? Su vida, porque para vivir, la soledad no es compañera; porque para vivir se necesitan dos. Porque hay un hueco en el borde de la cama inferior y un hueco en su corazón, que sólo tú podrás llenar, pero tu ausencia duele más que nada porque sabe que jamás regresarás.

 Después de ti, su respiro. Su respiro, antes de ser consumado por la última vela encendida al final de la mesa, la mesa donde solían cenar y mirarse a los ojos por largos minutos, mientras las risas protagonizaban una noche de felicidad.

Después de ti y su respiro, no quedará más. Porque cuando te fuiste te  llevaste todo. En los bordes de tu ausencia, fuiste artífice de sus más profundos anhelos y tejiste con él sueños, que jamás volverán.  Y cavaron las olas en busca de un hogar, pero hallaste burbujas flotantes que danzaban en silencio.
Después de ti, nada más. Porque alimentaste sus peldaños de esperanza transformándolos en realidad, y la realidad eras tú y ahora te has ido. Las horas del café y los chistes en la cocina han cesado, el beso mañanero de energías fortuitas. Todo se ha ido.

No sentirán dolor hoy, ni calor mañana. Porque los muertos no sienten nostalgia.


Itzel Rosas Caballero
 Conalep Teziutlán.

lunes, 10 de diciembre de 2012

“OTELO: EL MORO DE VENECIA”



WILLIAM SHAKESPEARE

Obra italiana de burda intriga que data del año 1603, aproximadamente. Cuyas líneas interpretan una obra con drama trágica en su totalidad.

Otelo no es precisamente el tipo perfecto para Desdémona, su color y su raza no eran idóneas para ella según su padre Brabancio. Otelo era general en el ejército de Venecia, era valeroso y honesto. Después las cosas cambian,  aunque Desdémona se casa con Otelo sin consentimiento de su propio padre, y es así como la hermosa chica pese a las hostilidades con su padre, se convierte en conyugue de Otelo.

 La estirpe de la tragedia se suscita con un deseo pasional de parte de Yago, ya que asedia sexualmente a Desdémona y como lo rechaza, la venganza de este villano es acusarla de adulterio ante su esposo. Otelo escoge a Casio como teniente y Yago suma su enojo contra Otelo ya que anhelaba ésa posición, porque también era militar.

Yago es un artífice del mal y como consecuencia, él mismo manipula a Otelo engañándole y sembrando semillas de cizaña para que dude de la fidelidad de su esposa, hace una serie de trampas, como embriagar a Casio para que sea despedido de su puesto por Otelo, y manipula a Desdémona para que sea mediadora con su esposo y así pueda regresar a su empleo.  Hace que la inocente esposa de Otelo abogue por Casio, y que todo parezca una infidelidad entre ellos. Ése era el plan maléfico de Yago: que Otelo crea que Desdémona y Casio eran amantes, se aprovecha de la “amistad” entablada con Otelo, y así aparenta que todo lo que le dice, es verídico. Otelo está intrigado y lleno de celos, Yago ocupa todo su potencial para destruir a Otelo y la confianza de su matrimonio. Casio, Otelo y su esposa Desdémona, son marionetas en su juego de mezquindad, lleno de artimañas malévolas.

Otelo, víctima de su manipulación, creído por la trampa de Yago, y sus “factibles” pruebas, mata a su esposa, la bella inocente es asesinada por su marido en un trance de enojo y celos fusionados entre sí, por la desconfianza y por creer en el chisme maquinado por Yago de que era infiel.  Yago no imaginó que su propia esposa Emilia, lo delatara revelando su maléfico plan; aunque por el comportamiento de Yago era lo menos que podía hacer, ya que él era el responsable de semejante atrocidad. Ella sabía que revelando el secreto, su vida terminaría pero no le importó y desmintió a Yago; lleno de ira y dando a conocer su lado más atroz, acuchilló a su esposa por haberle dicho la verdad a Otelo. Es una escena trágica donde los maridos han asesinado a sus esposas, llenos de sangre y de culpa han acabado con la paz en sus vidas. Yago por vengativo y avaro, por desear lo que nunca pudo poseer y Otelo por crédulo, por dejarse manipular por las palabras ponzoñosas de Yago.

Otelo ha perdido al amor de su vida por una mentira, la ha dejado desvanecer en un acto de brutalidad matando a su esposa; su sangre derramada por su mano. Él está devastado. Mató al amor de su vida, y su culpa es mayor que él mismo. Es llevado a Venecia para ser juzgado por el asesinato de su bella esposa, y Casio el que nombró como teniente, hereda todas sus posesiones. En realidad el porqué de tanta maldad de Yago, aún es un misterio porque el libro presenta argumentos pero no una respuesta. Otelo decide dar fin a su existencia, prefiere cortar de la tierra su vida antes de vivir sin su amor, Desdémona.

Itzel Rosas Caballero
Teziutlán

Once minutos


Autor: Paulo Coelho

Una chava muy hermosa  quería enamorarse; en la secundaria le gustaba un chavito un día se le acercó y no sabía qué hacer. El chavo le pidió un lápiz pero ella se quedó sin palabras; no supo qué decir. Al día siguiente esperaba que de nuevo se le acercara pero ya no pasó nada. Se desilusionó ya que le encantaba ese chavito. Meses después se enteró de que ese chavo se había ido lejos del pueblo, esperaba triste a que el chavo regresara pero nunca regresó. Un tiempo después conoció a otro y se enamoró. Él sólo quería jugar con ella, sólo quería tener relaciones ya que ella era virgen. Un día él la invitó a ir a pasear. Con mucho gusto aceptó; al principio se la pasaron muy padre pero él empezó a manosearla, y muy afligida y triste decidió marcharse. Se fue el chavo y la dejó ya que no sentía nada por ella; ella empezó a notar cambios en su cuerpo, notó que le salía sangre por su vagina y muy asustada le preguntó a su mamá y ella no le dijo nada. Para ella eran algo incómodos esos cambios, pero con el tiempo se acostumbró, diecisiete años después conoció a otro quien fue igual, al principio la hizo muy feliz y ya que ella era feliz, decidió entregarle su virginidad y a ella le gustó hacer eso. Estaba muy decepcionada de los hombres y decidió jugar con ellos. Ahora ella solo quería acostarse con ellos, y así pasó: conocía chavos y sólo jugaba con ellos. Así pasó mucho tiempo hasta que llegó un comerciante noble, guapo y muy caballeroso y respetuoso; al principio creía que quería lo mismo que los demás, pero con el tiempo le demostró que la quería en serio, se casaron tuvieron hijos y vivieron felices por siempre.

Nombre: Maricruz Flores Velázquez.
Enfermería general   grupo: A      
escuela: Conalep Atencingo 093


viernes, 7 de diciembre de 2012

Carta a un empleado de Telmex que instaló mal un teléfono





Estimado señor:

Como le he pagado a usted los impuestos del teléfono, muy deprisa que me cobran por la compostura de mi teléfono. Le comunico por medio de esta carta le escribo que, en el momento de la instalación y compostura, no me di cuenta del problema ocurrido. Lo recibí a usted en mi humilde casa para que lo arreglara, ya que presentaba unas fallas en la instalación que usted hizo. Muy contento de que ya tenía teléfono, a unas dos horas de que se retirara me propuse a usarlo y al realizar una llamada no servía.

Mi emoción por tener línea telefónica no duró mucho, con este problema de la instalación, por lo que me senté un momento a lado de mi teléfono a esperar un momento. Pensé que tal vez en ese momento no había línea, pero eso no era así,  ya que mis vecinos tenían y yo no. Entonces no podía seguir así, sin comunicarme. Cuando todos mis intentos por marcarles a mis vecinos fallaron, me puse a reflexionar que usted no había hecho con gran entusiasmo su trabajo ya que el problema se presentó y ahora me dispongo a reclamarle de lo sucedido.

Debo advertirle que usted no hizo su trabajo como debería ser, puesto que mi queja está escrita en esta carta en la que me veo en la necesidad de precisar  que yo no tengo conocimiento de la tecnología para tratar de arreglar esta falla, entonces, yo lo que a usted le confié un aparato que me permite comunicar con mis parientes y usted viene sin saber nada y me lo descompone. Mi teléfono era muy bueno y tenía buenas bocinas y era un teléfono muy caro; y usted viene y me lo descompone.

Ahora a mis parientes les extraña que no les hable, que no me comunique con ellos. Mi recibo de teléfono ya está  próximo a venir y yo no tengo línea telefónica, pero aunque no la tenga, a mí me cobran los servicios e impuestos de todos modos.

Pero yo sigo aquí en mi casa con todos estos montones de cables enrollados que cuelgan de mi techo, porque usted no sabe instalar teléfonos y dejó aquí todo un desbarajuste. Si usted probara mi teléfono se daría cuenta de su mal trabajo.

Por eso le escribo exigiéndole que haga su trabajo con responsabilidad, le digo lo sucedido para que no se vuelva a repetir. Bueno espero venga a mi casa a reparar la falla de la instalación y espero que mi teléfono quede muy bien y en buenas condiciones. Le agradecería su atención y apoyo.

Atte. Su cliente: Juan Carlos Espinoza Campos Nombre: Juan Carlos Espinoza Campos
Plantel: Atencingo 093
Carrera: asistente directivo
1er semestre

Biografía de BOB ESPONJA



Bob esponja es masculino de color amarillo. Es una esponja porosa con grandes ojos azules, boca con dientes grandes y pecas. No tiene cabello pero en ocasiones, dependiendo de la ocasión, se pone pelucas divertidas.Naciócomo el catorce de Julio de mil novecientos ochenta y seis.Bob esponja usa camisa blanca con corbata roja y pantalones color café; sus zapatos son de color negros, brillantes y relucientes. Ahora se encuentra soltero. ¡Vive en el fondo del mar enuna piña en una ciudad llamada Fondo de Bikini  con su mascota Gary que es un caracol y sus vecinos; es Calamardo y Tentáculos, que se enoja por cualquier cosa que hagaBob Esponja. Su otro vecino es Patricio Estrella,su mejor amigo. Y vive debajo de una roca, las cosas preferidas de Bob Esponja es jugar con Garyy Patricio y pescar medusas; pero lo que más le gusta  es hacerkangreburges en su trabajo. Él es cocinero en el Crustáceo Cascarudo.Trabaja junto con su vecino Calamardo Tentáculosy su jefe se llama don Cangrejo, es ambicioso pero bueno;también tieneuna amiga llamada Arenita que es una ardilla de Texas para Bob Esponja y Patricio, es su mejor amiga en todo Fondo de Bikini.Sr. y Sra. Pantalones Cuadrados son los padres de Bob Esponja y viven también en una piña debajo del mar.

Bob Esponja es feliz y muy optimista. Siempre se encuentra sonriendo, eso es lo que lo caracteriza. También en sus tiempos libres goza de soplar burbujas y de pescar medusas con sus redes junto con Patricio Estrellas, su sueño es atrapar la medusa más grande que es la medusa reina y tambiénuna medusa azul que es diferente a las ordinarias  que son de color rosa. Bob Esponja es estudiante de la escuela de botes de la señora Puff. Él no ha podido sacar su permiso de conducir. BobEsponja se describe como dulce, divertido, alegre, trabajador y digno de confianza.

El suceso importante paraBob Esponja en su vida, son los trescientos setenta cuatro premios seguidos del empleado del mes del crustasio cascarudo, Bob Esponja  tiene sus programas favoritos que son las Aventuras de Sireno Man y Chico Percebe que disfruta mucho ver con PatricioEstrella quienes quisieran ser como ellos. Bob Esponja fue evolucionando tras el curso del tiempo.En la época cavernícola fue Esponjagar, después. Sir Bob Esponja, después evolucionando en Buk Esponja y finalmente, el  Bob Esponja que ahora conocemos, pero para la época futura se pretendeque evolucionara en Esponjatron. Los principales parientes de Bob Esponja son el Capitán Azul,un ex-policía ysus primos: Stanley,su primo, quien dice que destruye todo lo que toca;y Cachiporra también primo. Solía ser un criminal, pero ya dejó su vida de crímenesy así es como termina la biografía de Bob Esponja.

Nombre: Juan Carlos Espinoza Campos
Plantel: Atencingo 093
Carrera: asistente directivo
1er semestre



jueves, 6 de diciembre de 2012

LOS PASTELES DE MARYTA


             

                Maryta  era la hija mayor de cuatro hermanos, del molinero del pueblo; un hombre bueno y ya entrado en años que poseía un pequeño huerto donde sembraban hortalizas y  algunas frutas que la madre de Maryta vendía en el castillo del Rey Alfonso. Pero un día, el padre de la niña se enfermó por mucho tiempo y no pudo seguir trabajando en su huerto; así que la madre de Maryta vendió los pocos animales que poseían y alquiló el molino para conseguir las medicinas y pagar al doctor que atendía a su esposo, pues en esa época era muy caro traer un doctor al pueblo, los pocos que existían cobraban muy caros sus servicios.

                Maryta y su mamá fueron a pedirle trabajo al Rey en su cocina, lo que consiguieron sin  ningún problema como ayudantes de cocina y aunque ellas se encargaban de la limpieza de trastes y pisos, la jovencita que era muy lista, no perdió detalle de la preparación de los platillos que ahí se cocinaban, pero en especial de los pasteles. Pues tenía una gran fascinación por aprender a cocinarlos; así que de vez en cuando, se ofrecía a ayudar ala pastelero del rey.

                Un día que se preparaba un gran banquete real, para festejar el cumpleaños del hijo menor del Rey el chef encargado de la cocina, llegó bastante borracho por una discusión que había tenido con su esposa y sin querer resbaló con un balde de agua que estaba cerca de la puerta  y al momento de caer, se llevó consigo el mantel de la mesa principal, haciendo un monte de ollas volcadas, platos rotos, espaguetis humeantes y uno que otro postre que ya estaban listos para servirse. Todo quedó en silencio absoluto solo pedrito un ayudante de la cocina alcanzó a gritar mientras se  tapaba la cara con las manos pues él había dejado el balde de agua cerca de la puerta, y temiendo lo peor, salió de la cocina avergonzado y llorando por el pasillo de la puerta trasera. Todos se pusieron nerviosos y el cocinero se desmayó. Entonces la madre de Maryta pidió a las demás que le ayudaran  a cocinar los platillos y postres que se habían arruinado. Así lo hicieron y el banquete se celebró con un poco de retraso pero como los invitados del Rey llegaron tarde. Nadie notó la llegada de los platos que faltaban.

Al siguiente día, el encargado de la cocina preguntó cómo habían hecho para reponer lo que se perdió, y  todos le contaron que entre Maryta y su mamá habían cocinado los pasteles, espagueti y demás viandas que faltaban. Explicaron que el muchachito que había dejado el balde en la puerta no lo hizo a propósito, el gran chef se disculpó por haber llegado borracho, volvió a llamar a Pedrito. Desde ese momento Maryta se convirtió en  la ayudante  del cocinero y aprendió muchas cosas hasta que por fin le llegó su oportunidad. Resulta que muy pronto sería el cumpleaños del Rey quien ordenó  que se preparara un gran festín para celebrarlo con sus amistades, pues este soberano, era reconocido por los cortesanos por ofrecer los más deliciosos postres y suculentos platillos. Así que el chef  le pidió a Maryta que elaborará los postres preferidos del rey también que ayudara con el  gran pastel de cinco pisos de  un sabor distinto cada uno, pues al rey le encantaban todos los postres y era un verdadero glotón.

Al finalizar el banquete, todos quedaron maravillados con la exquisitez de los pasteles y le pidieron al rey Alfonso mandar  traer al chef para felicitarlo. En un momento llegó el gran chef acompañado de Maryta y ambos fueron distinguidos como embajadores de los pasteles y a la chica la nombraron Chef Real del Castillo los meses pasaron. Pronto la joven se iba convirtiendo en experta en el arte  de la repostería, la gente comía sus pasteles y postres, los elogiaba con gusto; y sucedió que uno de los primos del rey que iba a ofrecer un banquete en su casa, le pidió al rey Alfonso le prestará a uno de sus cocineros reales para  encargarse de los postres en su castillo, pues su chef ya estaba demasiado grande de edad y quería deleitar a sus invitados con los postres que su primo les había convidado en sus reuniones, el rey  aceptó con la condición de que sólo se llevaría a Maryta por un tiempo, mientras su primo encontraba quién ocupara el puesto, sin imaginar que precisamente la jovencita era quien tenía el sabor en las manos.   

                Al igual que en ocasiones anteriores, la cena fue un éxito. Duques, Reyes, Varones y Condesas, quedaron fascinados con los postres que degustaron, pero como nunca falta un envidioso, una de las sirvientas del palacio real a donde había sido invitada Maryta a cocinar, planeaba cómo hacer quedar mal a la joven quien  ya casi cumplía sus diecisiete años. Pero sucedió que en una de esas fiestas, un primo del  sobrino del Rey la vio pro primera vez y se enamoró al instante de la jovencita que a parte de ser bella, cocinaba los postres más deliciosos y le pidió a su madre le permitiera visitar a su tío para poder encontrarse con la joven. Al Rey no le sorprendieron las frecuentes visitas de su sobrino puesto que él y su esposa nunca tuvieron hijos e incluso le causaba regocijo que a su sobrino le interesará meterse a la cocina a curiosear  un poco con el pretexto de aprender cómo se preparaban las exquisiteces culinarias, por lo que no vio nada en particular el que su sobrino frecuentara a Maryta.

Pasaron los meses y la chica tenía que regresar al servicio de su antiguo rey, pero Charles (el sobrino del rey) y ella, se encontraban totalmente enamorados y tuvieron que confiarle al Rey sus anhelos y desesperación por seguir juntos. El rey, que era un hombre bondadoso, apreciaba a su sobrino sobre manera y deseaba hacerlo feliz pero bien sabía que sus parientes no aprobarían esa unión. Así que decidió algo que le llenaría de satisfacción, pues nos sólo conseguiría una hija, sino también un heredero para su trono. Mandó traer a la madre de Maryta y le comunicó que adoptaría a su hija como propia y que esto sería bueno para ella pues obtendría un título que nadie le quitaría y la convertiría en Reyna, pues la chica estaba enamorada de su sobrino y al casarse se convertiría en Reyna, pero sobre todo lo hacía para que la familia de su sobrino la aceptara pues su cuñada era muy conservadora y no dejaría que su hijo se casara con alguien que no fuese de la realeza. La madre aceptó, y la boda ser realizó con gran pompa y así fue cómo las manos mágicas de Maryta le consiguieron un rey, un trono y la felicidad junto a su príncipe que a pesar de no ser azul, tuvo la suerte de encontrar una gran cocinera, repostera y madre de sus hijos pues tuvieron tres, dos bellas niñas y un varoncito, juntos gobernaron con benevolencia y prosperidad el reino que les fue heredado.           






Por: Briseida Neri Bravo
ORIENTADORA  EDUCATIVA
CONALEP TEHUACÁN

EL PAÍS DE LOS BUENOS DESEOS



Hace mucho tiempo, existió un país llamado Maravilla donde todos sus habitantes eran buenos y se ayudaban unos a otros; las hadas que viajaban a otros lugares del mundo para conceder deseos a los niños buenos, a las personas necesitadas y  a los niños huérfanos.

                El país de Maravilla, era un lugar hermoso rodeado de grandes arboles y verdes colinas y justo en el centro se alzaba un hermoso castillo de mármol blanco con destellos azules y plateados; y en medio del castillo una fuente dorada justo en el centro de un jardín de rosas, en forma de corazón al que se llegaba por varios caminos serpenteados, rodeados de hermosas flores coloridas y aromáticas que hacían sentir a quien caminaba como si estuviese en las nubes  y alrededor mariposas de muchos colores con destellos plateados y dorados .

Las encargadas de cuidar este país, eran las hadas luciérnagas llamadas así porque de esa manera las veían en el mundo exterior cuando se acercaban a la gente que las necesitaba, también estaban las hadas guardianas que adoptaban la forma de abejas para proteger el castillo y picar a los malvados magos  y hechiceras que deseaban entrar al país a robar la fuente de la vida y la sabiduría,  que se encontraba en medio del palacio. Esta fuente, contenía una especie de néctar que mantenía vivas a las hadas y de la cual provenían sus poderes, producidos por pétalos de flores arcoíris que se encontraban en el jardín en forma de corazón; estas  rosas sólo podían ser regadas con el agua de lluvia y el rocio de la mañana y de la tarde  para  florecer.   En manos de las hadas el néctar  producía sabiduría, juventud y vida, pero si algún hechicero(a) lo utilizaba con otros fines, se transformaba de inmediato en un ser repulsivo, hostil y amargado de quien la gente huía. Por tal motivo las hadas resguardaban celosamente el castillo para evitar que los intrusos lograran llegar a él.

Las hadas que lograban llegar a una edad avanzada, bebiendo el néctar de la fuente y al cumplir doscientos años el hada madre las transformaba en luceros y las colocaba en el cielo pero no todas lo lograban pues algunas morían en los viajes que realizaban al salir a buscar gente buena para ayudar o personas malas para cambiar sus impulsos y ablandarles el corazón. Porque en el país de maravilla todos eran buenos. ¿Y saben por qué? Incluso pensar en hacer algún mal tenía consecuencias: quedaban mudos antes de pronunciar palabra. Cuando alguien quería robarse algo sin pedirlo simplemente sus manos no le respondían y no lograba alcanzar el objeto que buscaba, si alguien intentaba golpear a otro  se quedaba inmóvil hasta que la sensación mala desaparecía, para los que estaban planeando hacer algo malo simplemente se quedaban dormidos y al despertar ya habían olvidado hacer mal, pero aquellos que en verdad deseaban corregir con todo su corazón, podían encontrarlo y ser hallados por las hadas luciérnagas para recibir la ayuda que necesitaban.

Estaban también las hadas sembradoras que se encargaban entre otras cosas de cultivar las rosas arcoíris dentro del jardín de corazón pero además  salían a regar semillas de plantas curativas para que la humanidad obtuviera los remedios caseros que conocemos y algunas plantas como el diente de león y la manzanilla  pues así los mas necesitados tendrían acceso a ellas sin tener que pagar un doctor   y podrán sanar rápidamente.

¿Te gustaría que este país existiera querido lector?

Por: Briseida Neri Bravo
ORIENTADORA  EDUCATIVA
CONALEP TEHUACÁNEJERCICIO  8                               

martes, 4 de diciembre de 2012

Un asunto tenebroso



Personajes:

GIGOLÒ          MESERO                     DEMONIO                   ANGEL BUENO
FREDY             GEMELAS                    FANTASMA                 PRINCESA

Esta historia tiene de todo: tragedia, llanto, alegría, enojo, muerte. De todo un poco. Bueno, comenzaremos.

En una casa muy hermosa por fuera de la calle Hidalgo, vivía un gigoló,  el más prestigioso de la ciudad. Él y su primo eran inseparables, como uña y mugre. Su primo era Fredy, un joven que estaba con él casi siempre.

La aventura comienza un día muy bonito, el gigoló estaba planeando una salida en la noche a una fiesta  a la que lo habían invitado, y pues claro, planeaba llevar a su primo para divertirse un rato, pero él no sabía dónde era la fiesta. Sólo sabía que dos amigas la estaban organizando; sólo le dijeron una vez y él se hizo del rogar y quedó en avisarles. Les habló en la mañana para que le dijeran detalles pero insistieron que si queríamos ir, primero debíamos de invitarlas a comer a un lugar muy bonito. Mi primo aceptó.

En la tarde nos encontramos con ellas en el lugar más hermoso de la ciudad para comer en los tlacoyos, y les explicaron los detalles pero había un pequeñísimo problema: ese mismo día le había prometido a una princesa que la iba a invitar a comer a su casa. Regresamos y de pronto, entre las tinieblas, apareció un demonio y entre las nubes se abrió paso un ángel y se sentaron en el sillón a los lados de mi primo. Y yo sólo observaba. El demonio empezó a decirle: −Mira, en la fiesta habrá chicas, habrá agua, miel…¡Ay, habrá tanta comida deliciosa! Piénsalo: tacos al pastor, tacos de carnitas, gorditas, tamales…¿qué más puedes pedir? y con tu princesita vas a tener berrinches porque ya sabes que es una berrinchuda de primera. Siquiera tendrás que sacar unos cinco mil pesitos entre lo que coma, (que si quiere caviar, que si quiere un poni, que si quiere cualquier aparatejo) y a la mañana siguiente habrá desaparecido y no la volverás a ver hasta que se acabe el dinero que te robó.

El ángel bueno respondió: −Ammh, no pues él tiene buenas razones, sí. Lo apoyo, ve a la fiesta y deja votada a la princesa. Y pues Fredy se quedó con cara de qué. ¿No acaso el ángel bueno debe aconsejar que se deben hacer cosas buenas y no malas? Pero en fin, a él no le importaba si se divertían. Estaba encantado.

El gigoló y Freddy quedaron en verse en un castillo para otra fiesta; fueron a las ocho treinta de la noche al castillo; bailaron un poco, pidieron algunas bebidas e hicieron amistad con un camarero que estaba por ahí, sirviendo y sirviendo bebida para ellos.

Salieron del castillo algo perdidos por el agua miel que les había obsequiado el nuevo amigo; de ahí fueron a la casa de las gemelas para ver qué había pasado con la fiesta, ¿cómo llegaron a la casa?... quién sabe. Muchos de sus amigos dijeron que Fredy y el gigoló, besaron a un poste de luz pensando que era Beyonce y la otra Madonna; llegaron a la casa para no encontrar nada. Sólo un basurero enorme y unos vasos llenos de vino tinto. Se los tomaron de trancazo. Vieron que toda la habitación se movía; en el último momento, vieron al camarero, a las gemelas y a la princesa riéndose como desesperados.

Ahora explicaré qué pasó. Resulta que las gemelas y la princesa eran hermanas, y el camarero, era el novio de las gemelas y habían planeado algo muy malo. Ellas ya se anticiparon a que iban a ir a un antro y sabían a cuál, el camarero iba a estar ahí para que las últimas bebidas que tomaran ellos, por cortesía del castillo, les habían rociado polvos mágicos que los hicieron perderse y marearse más de lo normal. Las gemelas, la princesa y el mayordomo sonrieron con cara de traición hacia ellos mismos.

Llevaron al gigoló y a Fredy a una catacumba en las afueras de la ciudad y los pusieron en una silla de metal que estaba clavada al piso. Ataron a los dos con un lazo que le habían quitado a un puerco y los dejaron ahçi, con un beso que les dieron las gemelas y la princesa. Pero la peor parte le tocó al gigoló, pues el mesero lo beso en la mejilla y lo vio con cara de: regreso más al ratito. Las gemelas, la princesa y el mesero, sacaron una botella y sirvieron una bebida para cada uno, pero cada uno había envenenado su bebida para que sólo uno quedara en pie y se quedara con todo el dinero que le habían quitado a esos pobres incautos. Los cuatro bebieron esperanzados a que uno quedara. De golpe cayeron los tres desmayados.

Despertaron el gigoló y su primo atados a la silla y empezaron a roer el lazo del puerco y tardaron dos días y medio para que el lazo se rompiera y pudieran salir de ahí. Salieron con el dinero y dejaron atados al mesero, a las gemelas y a la princesa a la misma silla con otro laso que le habían quitado a un perro. Las gemelas, la princesa y el mesero, sólo habían quedado dormidos por tres días por que resultó que no era veneno sino polvos mágicos para dormir. Salieron de ahí sólo con sus calzoncillos y una camiseta rosa y se fueron caminado a la ciudad sin verse siquiera a los ojos. Entraron a la ciudad y de pronto había un desfile gay que iba pasando y los vieron con cara de:¡Qué papotes! Nos encontramos los dos quienes corrieron como desesperados a su casa, se dieron una ducha porque se sentían asqueados.

A los tres días el gigoló fue a la casa de Fredy para platicarle un asunto, llegó y dijo lo siguiente: −Oye primo, conocí a unas trillizas y me invitaron a una fiesta. ¿Cómo ves? ¿vamos? Fredy se le quedó viendo con cara de: ¿qué?, ¿no aprendiste la lección? y le respondió: Dame cinco minutos, me voy a cambiar y salgo ¿va?

Alfredo López Ortega
Conalep 153
Teziutlán Puebla


CORAZÓN OBTUSO

Sonsacaste mi lado pensante
 mediante tus sonrisas indiscretas,
invocaste mi libertad a tu sitio
 con tus sublimes excusas.
Ondeando tu bandera sin insignia
 ataste mi corazón al tuyo;
 sin nudos ni grilletes lo tomaste
 lo convertiste tuyo.

Mirada surreal
con tu caminar de lado
y tus notas de blues.

Mi respiración vibra tras la tuya
 en la cavidad de tu aliento.
Tu corazón exhala regando colores
 goteando.
Me pierdes en el rozar de tus labios
 en el vayven de tu acento.

Entonces me llevas sin tocarme
 me regresas sin devolverme
sobre las olas del mar
 en la espalda de tu pasión absuelta.

Como un murmullo dentro de tu sonrisa mientras no merme
en tus palmas
 en tus gestos de niño tras una mirada absoluta.

Tu sombra tras mi silueta difusa
 como tus labios tras un beso.
Culminaste mi efímero deseo en el andar de tu suspiro.
Fulminaste la oscuridad de mi paladar
 en el día de tu regreso.
Diste nombre a mi cavilar
 aparcaste mi terror al caminar. (Cuidado con esta rima: Cavilar, caminar, paladar, supirar,
Vuelve al texto monótono. El verso libre es mejor que no tenga rima.

Transformaste mi quebranto sanando mis llagas
e envolviste en mi interior
me curaste.
 Me presentaste tu ser
 te ocultaste en mi mirada
cultivaste mi forma de amor
 dentro de tu corazón obtuso.

Itzel Rosas Caballero (Favor de poner datos)
Teziutlán