viernes, 2 de diciembre de 2011

¿Lees lo que yo leo? 39:Ética para Amador

Fernando Savater
Este libro habla de muchas cosas interesantes, sobretodo de lo que va la ética, veremos muchos ejemplos que nos pone el autor, además sabremos muchas estrategias para lograr ser unos buenos ciudadanos y como formarnos para vivir en sociedad. Ya sabemos que para vivir en sociedad tenemos que respetarnos unos a otros, cumplir con nuestros deberes y obligaciones que nos corresponden a cada quien, tenemos que ser responsables de nuestros actos y acciones, antes de hacer algo tenemos que analizar si es algo bueno o malo, las consecuencias que provocará y los beneficios que traerá, pero antes de hacer esto tenemos que concientizar y analizar nuestra idea y el acto que queremos hacer, todos cometemos errores pero no los mismos, porque vivimos para aprender de los demás y así ir formando al ciudadano día con día, pero aun así somos libres de hacer lo que queremos, libres pero con responsabilidad de poder decidir en nuestros actos y acciones.
Este libro me pareció muy interesante, ya que habla de muchas cosas como de las que nos convienen y de las que no. Son muchas cosas que aun no hemos aprendido y tenemos que aprenderlas ya que será para beneficio nuestro, para aprender a vivir en sociedad, porque nosotros somos los que formamos al ciudadano, día con día se va formalizando y va aprendiendo a vivir en sociedad, sobre todo tiene que aprender de sus derechos y obligaciones, para que cumpla con su deber como ciudadano. Para poder hacer lo que uno quiere hay que arriesgarse y ver el resultado de nuestra acción, como también hay que saber lo que quiere uno hacer, para poder realizar nuestro objetivo, tenemos que estar consientes de lo que vamos a hacer, para esto tenemos tomar decisiones para ejercer los valores que nos enseñan. Este libro nos enseña que todo hombre tiene su hábitos y costumbres que realizamos a diario, por ejemplo: los estudiantes, a lo que ya estamos acostumbrados es, a levantarnos muy temprano a cierta hora, cuando suena el despertador, y casi durmiendo irnos al baño, lavarnos la cara, enseguida los dientes, peinarnos, ponernos el uniforme, después esperar la micro para irse a la escuela, pero antes de que pasara la micro a recogernos, en el justo momento de salir de la casa nos encontramos un botella de plástico y la pateamos por toda la calle durante el recorrido hasta llegar a la parada del microbús, ¿Por qué hicimos esto?, lo de levantarse temprano, lavarse la cara, lavarnos los dientes, cambiarnos en vez de irnos de calzoncillos, peinarse, todo esto lo hacemos por costumbre o por hábito, y porque es una obligación de nuestros padres para beneficio nuestro, en cambio lo de patear la botella lo hacemos porque sí, porque se nos da la gana o tal vez porque no siempre nos encontraremos una botella para poder patearla. Todos tenemos nuestros caprichos y los hacemos cuando nos los proponemos, por ejemplo: en el caso de Esaú, que cambió su primogenitura por un plato de lentejas que deseaba con ansiedad, eso sí fue un capricho que quiso hacer por decisión suya sin que nadie lo obligara.
Voy a poner un ejemplo mío, o más bien un capricho, durante el transcurso de la lectura, cuando yo iba leyendo en la página 33, justo en ese momento mi mamá me dijo: ¡hija vente a comer que la comida se va a enfriar!, y como yo estaba muy entretenida con la lectura, que además esa parte me pareció muy interesante, pues no le hice caso a mi mamá, yo seguía leyendo sin distraerme ni un solo segundo, no pensaba en nada más que en la lectura, es más hacía de cuenta que no oía nada, pero mi mama gritaba una y otra vez, ¡hija vente a comer!, Entonces de tanto ruido y tantas voces yo le dije a mi mama, ¡no tengo hambre! Y me fui para el otro cuarto, no le respondí de una manera grosera ni con agresividad, sino que lo hice con el simple hecho de que no me volviera a distraer, ¿Qué fue lo que hice?,.. Si, un capricho mío hice lo que se me dio la gana y almorcé hasta que terminé de leer ese capítulo, me tomé la libreta de hacer mi capricho y de desobedecer a mi mamá, solo hice un ejemplo que puso en autor en el libro, me arriesgue y quise ver las consecuencias de mis actos y experimentarlos yo misma, pero me di cuenta que antes de hacer algo tenemos que concientizar y ver las consecuencias que nos traerá, pero para mí en ese momento lo más importante era la lectura. Tengo bien claro que en lo único que no podemos tomar decisiones es en lo que nos pasa, porque no sabemos el futuro, lo que nos va a pasar, por ejemplo; un marinero no le pueden dar a elegir si quiere que le salga una tempestad en pleno viaje, si va a ser un viaje a como dé lugar el tiene que cumplir con su trabajo y arriesgarse el mismo junto con su tripulación, no importa que tan importante sea su cargamento, pero si viene una tempestad el tiene que decidir entre su tripulación o su cargamento, tendrá que tomarse la libertad de decidir lo que mejor le convenga, nadie lo puede obligar a hacer algo que va en contra de su voluntad.
Al menos este capitán no era tan egoísta como Kane, el era un multimillonario que con pocos escrúpulos ha reunido en su palacio de Xanadú una enorme colección de todas las cosas hermosas y caras del mundo, el tenia todo, pero lo que no tenía era el afecto de los demás, no tenía amistades ni amor verdadero, tenía el respeto de los demás, pero no ganado por sí mismo, sólo comprado con su dinero, porque a todos los que le rodeaban los utilizaba como simples instrumentos, cuando Kane murió murmuro ésta palabra, ¡Rosebud! éste es un nombre escrito en un trineo con el que él jugaba cuando era pequeño, y aún vivía rodeado de amor y la amistad de sus amigos, él pensó que el camino fácil era el dinero y las cosas de lujo, al final se dio cuenta que no, una cosa bien clara es, que el dinero puede comprar todo menos el cariño, el amor y la amistad de los demás.

Nombre: Alma Delia Arce Pérez
Atencingo

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