Estaba allí la escritora
tarareando una canción
y es que el libro que leía
tarareaba su pregón.
De pronto se le aparece
la calaca y le pregunta:
− ¿Qué haces ahí sentada?−
−Nada−ella le contestó.
y la calaca sentada
solamente la escuchó
y la escritora asustada
oor una araña falleció.
Con el gesto que tenía
Hasta la calaca gritó.
Alfredo López Ortega
Teziutlán
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Recuerda que tu mensaje pasa por un proceso de moderación para aparecer publicado.